
Uno de los atractivos más emblemáticos que posee la Ciudad Vaticano, es por supuesto la Basílica de San Pedro. Forma parte del grupo de edificios más grandes que existen en el mundo y representa la mayor de las basílicas papales.
Al visitarla sentirás sensaciones indescriptibles por la belleza y arte que con las que está creada, pero conocer la historia de la basílica de San Pedro también llegará a sorprenderte.
La teoría aceptada por la iglesia es que la basílica fue edificada sobre la tumba de San Pedro, uno de los apóstoles que siguieron a Jesucristo y que más transcendencia a tenido a lo largo del tiempo.
Por otro lado es uno de los lugares más turísticos y visitados del mundo. Por su historia y simbolismo es frecuentado tanto por católicos como no católicos. La Basílica de San Pedro de Roma es asombra tanto por su belleza interna como externa.
Además es una muestra de la expresión de todos los Papas que han regido el lugar durante el Renacimiento. Y por si fuera poco es donde reside el Papa, ya que es la sede universal del catolicismo. Desde aquí se marcan las pautas y camino que seguirá la iglesia católica a escala mundial.

️ Origen de la Basílica de San Pedro
El origen de la Basílica de San Pedro se remonta al siglo IV. En esta época el emperador Constantino tomó la decisión de edificar una basílica en el lugar donde se encontraban los restos del apóstol San Pedro.
Fue en el año 329 cuando se terminó la construcción de la basílica, la cual era usada como cementerio cubierto para celebrar el culto y sala de banquetes durante los actos funerarios.
Con la llegada de la Edad Media se convirtió en uno de los principales lugares de peregrinación en todo occidente.
La historia de la Basílica de San Pedro está marcada con la llegada de 1506, momento en el que se da comienzo a una nueva edificación por en encargo del papa Julio II. Este trabajo se le encargó al arquitecto Donato Bramante, persona a la que se le debe su contorno, en forma de cruz griega, propia de las iglesias bizantinas del siglo IX.
Posteriormente fue pasando en manos de diferentes arquitectos, como Rafael Sanzio se hizo cargo del proyecto antes de Antonio da Sangallo, apodado «el Joven».
Su construcción se dilató en el tiempo con sucesivas reformas, finalizando el proyecto en el año 1538.
Aportación de Miguel Ángel
La historia de la Basílica de San Pedro no tendría sentido sin hablar de Michelangelo Buonarroti, mundialmente conocido como Miguel Ángel.
Se encargó de cambiar el diseño al transformar los límites externos de la basílica con la creación de un muro continuo y el levantamiento de una cúpula sobre un tambor, idea que fue llevada a cabo finalmente por Jacobo de la Porta.
Poco después, el Papa Pablo V decidió remodelarla y colocar la iglesia justo en frente, proyecto que decayó en manos del arquitecto Carlo Maderno.
A él se le debe la transformación de la tradicional cruz griega en la cruz latina. Después de esta remodelación pasó a edificar la fachada principal, que se completó entre los años 1607 y 1612.
Juan Lorenzo Bernini aportó su arte entre los años 1624 y 1633, llevando a cabo la edificación del altar mayor en el centro de la cruz. El resultado fue una obra de arte única en el mundo por su complejidad y refinamiento artístico. Esta fue la última gran reforma realizada en la historia de la construcción de la Basílica de San Pedro.

La Basílica de San Pedro en la actualidad
El resultado final de tantas reformas y ampliaciones, es la composición de un edificio de 136 metros de alto y 218 metros de largo.
La superficie total es de 23 mil metros cuadrados, por lo que llega a resultar majestuosa cuando nos paramos frente a ella.
Como puedes ver, la historia de la Basílica de San Pedro, así como su diseño artístico y dimensiones, resultan especialmente interesante. Millones de turistas la visitan anualmente quedando fascinados con el valor de todo lo que allí se exhibe junto con el importante legado de los papados que desde hace siglos han ido aportando.
El turismo en la Basílica de San Pedro
La Basílica de San Pedro que podemos ver hoy día, está ubicada en el mismo lugar que la Basílica de San Pedro original. Es decir, que es el lugar exacto donde se encuentra el apóstol. Este es uno de los motivos por que el que resulta ser un atractivo para los visitantes aparte de sus dimensiones, arte y posibilidad de ver al papa.
El flujo del turismo también forma parte de la historia de San Pedro de Roma, y no es para menos, ya que la casa del catolicismo forma parte de los monumentos más visitados del mundo.
Miles de turistas se acercan diariamente para conocer este impresionante centro religioso y cultural. La basílica es con total seguridad, el lugar más importante de la humanidad en valor patrimonial e histórico.
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Actualizado el 17/09/2024